Cartas que viven ...

La tecnología, va a su paso sin querer acabando con antiguas costumbre como la de escribir cartas.
Desde que tengo recuerdo, en mi casa se hablaba de las cartas de mis abuelos, e incluso mi mamá y mi tía poetizas por naturaleza, escribieron sendos poemas sobre el tema. Buscando algún documento, encontré algunas de mi padre, con una letra esmerada en tinta, con un texto, educado respetuoso pero con gran matiz amoroso, imagino mi mamá al leerlas envuelta en una nube de amor. Aquellos sobres y hojas perfumadas del calor de las manos del que las escribía. Tal vez incluso, una lagrima en una hoja, un beso guardado entre el papel para que viajara dentro del sobre.
Cartas que iban y volvían en respuestas ansiosamente esperadas, el cartero el personaje de época mas esperado.
¿Se escriben cartas hoy? Aún hay románticos que lo hagan a mano plasmando sentimientos, grandes en palabras pequeñas de gran significado o solo un tqm de servicio de mensajería, que descubrí quiere decir te quiero mucho en lenguaje juvenil y no tanto.
O mail intentando acercarse en algo a una carta, pero a pesar de eso con el tiempo terminado en la papelera de reciclaje.
Seria tan lindo volver a renacer estas viejas costumbres, preparar el sobre y el papel, darle nuestro toque, una gota de perfume, un rizo del pelo en su interior, menos pero tal vez marcas de lagrimas no de pena de emoción por lo sentido al momento de transcribirlo en la hoja.
Y como las cartas de mamá y de mis abuelos, vayan pasándose de generación, en generación, conociendo nuestra historia de amor familiar por sus protagonistas.
Es tan difícil apagar de vez en cuando la computadora, e ir con el sobre en la mano hasta el correo. Si les parece difícil, piensan en la cara de la persona que lo reciba.
Seguro vale la pena.
Bienvenida tecnología, que nos acerca, cotidianamente por un lado, pero nos aleja la parte cálida, por el otro , no digamos adiós del todo a lo antiguo conservémoslo.
Escribe una carta te sentirás bien.

Estela Albini
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