
Damos mas cuando el sacrificio es por quienes amas mas que por uno mismo.
Es una fuerza interior que te da fortaleza, es como ver sus sonrisas viéndote a cada paso.
El cansancio parece menor cuando trabajamos con esa imagen y esa sensación de dar, el cansancio parece que desaparece, y nos da una sensación de plenitud.
Dando es que recibimos, sembrando es que cosechamos.
No hablamos de grandes sacrificios porque se presentan en casos puntuales sino la pequeños esfuerzos de cada día,para ir pintando sonrisas, un pequeño esfuerzo para ti puede ser una alegría tan grande para quien la recibe.
No perdamos estas grandes oportunidades que se nos van presentando, cada nuevo día que iniciamos, conoce la alegría de dar.
Para Anto.
Estela Albini para existoporti.blogspot.com
egamfer
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